¡¡¡Buenos díaaaas!!!
Aprovecho la entrada de hoy para comunicaros que ya somos CINCO compañeros!!! Ha llegado Jesús, un niño muy tranquilo y sonriente.
Como observaréis, la incorporación de niños al aula se está produciendo de manera gradual y progresiva, esto facilita el proceso de adaptación de los ritmos individuales de casa a los de la escuela, además de ir creando poco a poco un vínculo afectivo sólido entre niño y educadora. De esta manera, se facilita el período de adaptación a la Escuela.
En esta etapa es importante aunar las rutinas de sueño y alimentación para poder dedicar otros momentos de trabajo con el niño, no tan sólo asistenciales. Seguramente, una de las principales preguntas que os hacéis los padres es ¿Cómo trabajan con niños tan pequeños, qué hacen todo el día? Pues diariamente aprovechamos momentos especiales a la atención individualizada y no podéis olvidar que cada una de las rutinas tiene siempre un enfoque pedagógico, es decir están aprendiendo en todo momento.
Ejemplo:
En una rutina de alimentación, como puede ser una toma de biberón, mediante la postura que adoptamos al colocarlo de uno u otro lado, estamos reforzando su Lateralidad (alternamos derecha e izquierda en cada toma) por otro lado estamos consolidando el vínculo y la comunicación entre ambos, contándole que va a comer, cantándole una nana al tiempo que establecemos el contacto visual, auditivo y del tacto.
En definitiva, el niño se siente querido, estimulado y atendido.
Algunas fotos de rutinas:
Comer, comeeeer, Comer, comeeeer,
Comer, comer para poder creceeer...
Recién levantados de la siesta, nos ponemos guapos para irnos con papá y mamá...
Sshhhhhh.... Ya se han dormido los angelitos... Zzz... Zzz...
Aprovecho la entrada de hoy para comunicaros que ya somos CINCO compañeros!!! Ha llegado Jesús, un niño muy tranquilo y sonriente.
Como observaréis, la incorporación de niños al aula se está produciendo de manera gradual y progresiva, esto facilita el proceso de adaptación de los ritmos individuales de casa a los de la escuela, además de ir creando poco a poco un vínculo afectivo sólido entre niño y educadora. De esta manera, se facilita el período de adaptación a la Escuela.
En esta etapa es importante aunar las rutinas de sueño y alimentación para poder dedicar otros momentos de trabajo con el niño, no tan sólo asistenciales. Seguramente, una de las principales preguntas que os hacéis los padres es ¿Cómo trabajan con niños tan pequeños, qué hacen todo el día? Pues diariamente aprovechamos momentos especiales a la atención individualizada y no podéis olvidar que cada una de las rutinas tiene siempre un enfoque pedagógico, es decir están aprendiendo en todo momento.
Ejemplo:
En una rutina de alimentación, como puede ser una toma de biberón, mediante la postura que adoptamos al colocarlo de uno u otro lado, estamos reforzando su Lateralidad (alternamos derecha e izquierda en cada toma) por otro lado estamos consolidando el vínculo y la comunicación entre ambos, contándole que va a comer, cantándole una nana al tiempo que establecemos el contacto visual, auditivo y del tacto.
En definitiva, el niño se siente querido, estimulado y atendido.
Algunas fotos de rutinas:
Comer, comeeeer, Comer, comeeeer,
Comer, comer para poder creceeer...
Recién levantados de la siesta, nos ponemos guapos para irnos con papá y mamá...
Sshhhhhh.... Ya se han dormido los angelitos... Zzz... Zzz...
Es genial que los peques se sientan como en casa y que además empiecen a saber lo que es ir al cole!!!
ResponderEliminar